Negocho

Centenas. Precio en publicidad. Nunca te ví en la web, aunque fui testigo de esas fotos. "Chaineado" para la ocasión, se interesaron dos y el último se quedó con vos. Debía llegarse el día. Aunque los desembolsos fuertes permitían quitarle dos o tres hojas al calendario, la presión quincenal ya empezaba a desgastar mucho la suela del zapato. Tres años y medio, transporte personal, conyugal y familiar de oriente a poniente, y de norte a sur. En el recuerdo, el maltrato en Mercedes, el ahorro en Guatemala o las tantas veces en aquel "garage" ajeno. Te critiqué, te destruí en abstracto, pero te consentí. Nunca "regular", aceite francés y gringo. Limpio, casi siempre. Cuando requeriste taller, invertí. Quizás hasta gasté de más. Y, sí, no lo voy a negar: Me sacaste de varias. Como aquella vez, bajando a medianoche de Cojute. O el día que a pura reserva, caminaste más de 30 kilómetros. Debo estar agradecido, jamás me dejaste varado. El mayor susto se superó con un panal nuevo. Eso y refrigerante. Lo demás, es historia. Hoy, cambiaste de dueño. Seguramente, como al panel, te veré pasear por las calles. Prometo saludarte, desde la acera donde me verás caminar, quizás, por un par de años. ¡Buena suerte, halcón! El rosario te acompaña.

Se ha escrito,
Paz y Bien.

Comentarios

Entradas populares de este blog

#HastaPronto

Propósitos 2024

#Ex