Escepticismo 17

Casi 2 arriba. Respeto, comprensión, balance. Acuerdo de pago y listo. Tarde de mayo, estacionamiento disponible, Centro conocido. La amabilidad del vigilante generó calma y le dio esperanza a la duda. De pronto, tenía sentido confirmarlo. El "switch", el timbre y la puerta. El "numerito", la espera y el turno. Choyudez en el aire, la caricatura en la tv y la cifra roja en la pantalla. Paso, alcohol, pinchazo, toma y espera. ¿Dónde? El Rosario, la Taza de Café tomaron la delantera. Por la hora y la afluencia terminamos en la cafetería. Muy buena opción. Nada mejor que la comida casera, sin duda. "Platanitos", crema, quesadilla y té. La idea era cenar en casa, por eso lo ligero. Otro monitor, el canal para niños, la buena plática y tu compañía. El ambiente ideal, mientras transcurrían los 60. Y, a falta de relój de pulsera, el móvil. El "bajoncito", aquella torta que no fue, la sonrisa nerviosa, la caminata en el pasillo. Una segunda opinión, la que nunca está de más. La espera final, su nombre, el sobre. Lo demás, insisto: la voluntad de Dios.

Se ha escrito,

Paz.