"...y yo merezco vivir mi vida"

Esta tarde, divagando y conectado al MSN, conversaba atentamente con una "personita" que, poco a poco, se va ganando mi respeto, admiración y confianza.

Sí, lo sé, algunos dirán: ¡Gran cosa!. En fin.

Cuando, de repente, el egoismo exagerado "movió" mis dedos e hizo que digitara en mi respuesta a su pregunta, el título de esta entrada.

Su respuesta fue casi inmediata, diplomática y, a mi gusto, muy acertada.

Bien por ella. Me hizo recapacitar y sentarme a escribir esta entrada.

¡¿Cuántas veces ha sido usted títere de su egoismo?!

De seguro, ni se ha dado cuenta.

Lo difícil se da cuando su actitud hacia la vida afecta a las personas que están a su alrededor.

Más, si se trata de un ser querido cercano.

¡Cómo duele!, ¿no?.

Pero nos gusta salirnos con "la nuestra".

Aunque dure tan poco, ¿no es verdad?.

Por eso, aprecio tanto la reacción de mi web-chera de este día.

2 líneas bastaron para dejar claro que mi punto de vista estaba torcido.

¿Exagerado?. No sé, pero quise escribir estas líneas.

Por ratos, los humanos deseamos convertir el libre albedrio en pasaporte y visa para ejercitar y cumplir deseos y fantasias animadas en 3D.

¿Por qué?. Bueno, cada quién lo sabrá.

Mientras tanto, seguiré buscando la "salida", colocando las señales, en la posición correcta, de la ruta de evacuación. Por el bien de la armonía y la paz a mi alrededor cercano.

Y usted, ¿cómo hace para controlar sus impulsos egoistas? #LaPregunta

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Se ha escrito,

Paz.