"Otra sección más..." RARC

Hola, ¿qué tal?, buen día, un saludo desde este su blog. Como dije antes, las reformas vendrían..., en esta oportunidad debo decirles que, a partir de este día, abriré las puertas a una nueva sección a la que denominaré: "Copypasteo: izquierda y derecha", sí, un tanto chafa el nombre, pero, creo que éste reflejará su contenido..., la idea es publicar en este espacio notas, ensayos o reportajes escritos por autores con ideología "de derecha" o "de izquierda", que han sido publicados en la web, de forma anónima o con nombre y apellido..., bueno, a ver qué tal..., por ahí dejo el primero:

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LOS EXABRUPTOS DE AVILA

"Los órganos oficiales de propaganda de Arena, como era de esperar, hicieron caso omiso del exabrupto del candidato presidencial, el fracasado policía Rodrigo Ávila, cuando este le pidió a Mauricio Funes que “se metiera las encuestas en donde mejor le cupiera”, al tiempo de expresar que a “mareros y pandilleros de Ciudad Delgado se les habían terminado los buenos tiempos porque hemos recuperado la alcaldía”.

En su triunfalismo inútil también aseguró haber ganado la comuna de San Martín. Todo eso no es más que falsedades, calumnias y acusaciones gratuitas.No son todas estas ruindades, mentiras, terrorismo verbal e incoherencias; la lógica respuesta de una persona desesperada y consciente de las serias dificultades afrontadas desde el principio de su candidatura enla carrera presidencial?

Acaso se necesita un estudio más detenido de su personalidad para suponer cuáles son los valores que se vehiculan con semejante lenguaje al conmocionar la aparente tranquilidad de nuestro país y calumniar así a sus rivales políticos, en ningún momento enemigos?Los resultados obtenidos en las recientes elecciones indican, claramente, que Arena ganó la alcaldía de San Salvador; la manera en que se produjo queda para el análisis futuro; es poca cosa si vemos el panorama general donde el FMLN surgió como la primera fuerza política al obtener mayoría de diputados y conquistar alcaldías claves en importantes cabeceras departamentales como Santa Ana, La Unión, Usulután, Zacatecoluca y retener Santa Tecla.

Un golpe estratégico fue el triunfo del municipio de Izalco, donde tradicionalmente el partido gobernante arranca sus campañas electorales.El señor Ávila, despreciando con arrogancia intolerable todo concepto de respeto a sus adversarios políticos y a la misma inteligencia de los salvadoreños, ha querido desviar la atención pública de los graves problemas que padece el país y, al mismo tiempo, del triunfo inminente del candidato Funes, al sacar conclusiones apresuradas y percepciones equivocadas de la victoria de la alcaldía de San Salvador.

Por ignorancia, por pragmatismo chapucero, por un triunfalismo exacerbado, no menciona que la mayoría de municipios del área metropolitana fueron retenidos por el FMLN, además de quitarle a Arena las alcaldías de Tonacatepeque y Panchimalco. Por lo demás, el partido de izquierda llega fortalecido a las elecciones de marzo, con un valor agregado de 100 mil votos, lo que expresa claramente de qué lado están las preferencias para los comicios presidenciales.

Las tan lamentables como persistentes realidades del sistema político salvadoreño (hasta el momento de escribir este comentario los inútiles del Tribunal Supremo Electoral no han dado resultados concretos de las elecciones para diputados y concejos municipales) no permiten el análisis público de todos los factores que coinciden en contingencias, como las que surgieron en los comicios del domingo 18 de enero.

Es más, el propio magistrado presidente del TSE calificó de “chusma” a los ciudadanos que en municipios como San Isidro, Santo Tomás, San Rafael Cedros y otros, defendían con valentía y encendido civismo la consumación de fraudes electorales, o el intento del oficialismo de arrebatarles el triunfo obtenido en las urnas.Se tratan con el mismo rasero inconformidades de diversos sectores populares (expresadas con lealtad y franqueza) y las conspiraciones subterráneas, exabruptos y actos terroristas verbales, como los ya señalados al policía fracasado Rodrigo Ávila. Es el mismo tenor que ha seguido la campaña sucia y la propaganda negra, utilizando grupos de fachada, testaferros, mercenarios de la palabra y lacayos.

Un lamentable diseño de ofensas y calumnias no sólo aprobadas sino, más bien, financiadas desde las mismas entrañas de Casa Presidencial, puesto que el mismo mandatario sale a la palestra para atacar y calumniar cuando se ve acosado y superado por las mismas realidades que diariamente afrontamos y sufrimos los salvadoreños.Cuántas veces el presidente ha reiterado que “intereses ajenos amenazan la estabilidad de nuestro país”; o, directamente y sin análisis, ha mentido descaradamente al decir que “se han detectado grupos de sujetos armados en distintas regiones del país”; o lo más reciente, al declarar sin empacho alguno que “se detectó una columna de 100 sujetos armados en Suchitoto, los cuales tenían la intención de dispararle al helicóptero en que viajaba el presidente”.

El ex presidente de la república, Armando Calderón Sol, ha exigido mesura en esas declaraciones y ha reiterado que “en el país ya no existen grupos irregulares de hombres armados”.Lo cierto es que no se exhibieron atingencia y honestidad política para separar los impulsos espontáneos de tales conspiraciones al “servicio de intereses extraños”, como “los encabezados por Mario Belloso”, repite el dinosaurio de el diario de hoy, de las sandeces y calumnias propaladas por el señor Ávila.

El triunfalismo es peligroso, las percepciones mal analizadas conducen a caminos sin retorno. Los dirigentes de Arena deben aceptar que no tienen derecho a premio ni a estímulo alguno pues no han cumplido con las tareas que, bien o mal, un porcentaje de la población les encomendó al entregarles la presidencia por cuatro periodos consecutivos. Atribuirse “grandes obras” y el “hemos trabajado por el bienestar de los salvadoreños” es mentir descaradamente; es, como dicho está, faltar al respeto, a la inteligencia y madurez de este pueblo.Deben, de una vez, conformarse con la alcaldía de San Salvador y aceptar el triunfo inevitable de la fórmula presidencial del FMLN en las elecciones de marzo próximo. Deben saber que existe una comunidad de propósitos y un emotivo entendimiento del pueblo con el joven líder Mauricio Funes.

Es universalmente conocido que toda alianza popular es un impulso consciente y razonado de los diversos sectores de la comunidad nacional en torno a un candidato para fines concretos. Esa alianza se configura no sólo con el masivo apoyo de la población, sino con el reconocimiento de muchos gobiernos del mundo, incluso de figuras como el nuevo arzobispo de San Salvador, quien ha dicho que es “necesaria la alternancia en el poder para consolidar la democracia”.

Los hechos prácticos de la fórmula presidencial del FMLN, al proponer puntos concretos para superar los graves problemas heredados por los cuatro regímenes de Arena, son aceptados por la población; no se trata de prometer “más empleos y mejores ingresos”, como repite el tránsfuga Zablah, sino crear oportunidades con inversiones en la industria y el comercio, con la reactivación de la agricultura, con una agresiva reconstrucción de la infraestructura dañada, con mejores carreteras y construcción de hospitales, escuelas e institutos. Esto produce empleos, genera estabilidad y brinda oportunidades a miles de salvadoreños.

Además debe mencionarse la actitud y los empeños del candidato Funes en el ámbito internacional, exaltando la imagen de nuestro país en identificación plena con las mejores causas de nuestra época, buscando apoyos y ayuda que de mucho servirá para el progreso y bienestar de El Salvador.Los exabruptos, las mentiras y los ataques alevosos del policía fracasado Rodrigo Ávila, así como la demagogia, la servil unanimidad, la ausencia de precisión y las equivocadas percepciones de los dirigentes y funcionarios de Arena, no facilitan ni contribuyen a la estabilidad de la nación; por el contrario, enturbian la atmósfera y no ayudan a la transparencia política, como bien señalan miembros de la Misión de Observadores de la Unión Europea.

Si las mediciones no se equivocan y los salvadoreños logran añadir un 20% a esos 100 mil votos de ventaja obtenidos en las pasadas elecciones por el FMLN, el TRIUNFO EN LA PRIMERA VUELTA está totalmente garantizado. Esta es la realidad y la única verdad que tratan de esconder, de evadir, los publicistas y asesores de la guerra sucia del partido Arena.

Pocote

Publicado por pocote en jueves, enero 22, 2009
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Opiniones, por el debido medio, salú.

PD: Espero no causar problemas al publicar estos escritos...