Viaje a Izalco 08 ..., "¿cuándo es el otro, pues?" RARC.

Hola, ¿qué tal?, buen día, saludos al lector, en esta oportunidad me dispongo a describir la entrada que corresponde al sábado 12 de Abril del presente año, un día especial, debo reconocerlo, la primera experiencia académica fuera de la universidad, en esta mi nueva experiencia de estudiante de educación superior, una "gran cosa", la verdad, sin mas vuelta inicio.

Desde el jueves se había acordado reunirnos cerca de "la entrada de la Minerva", a las 7:00 AM, jeje, CLARO!, como buenos salvadoreños, solo algunos estaban en el lugar a la hora programada, jeje, así dió inicio la primera aventura académica fuera de las fronteras de la "Alma Matter".

Algunos sin desayunar, otros como un servidor compartiendo lo de la "lonchera", cada quien iba asumiendo su participación, todo desde un inicio, la verdad, una verdadera muestra de compañerismo, excepto una decisión tomada que quizás no valga la pena comentarla, la verdad.

De la U hacia la Terminal de Occidente, ahí abordamos un Bus "Especial", de esos con aire acondicionado y televisor, un viaje cómodo, sin mucha parada, cerca de una hora para llegar a nuestro destino: Izalco.

Al acercarnos al desvío hacia Izalco, sobre la carretera hacia Sonsonate y Acajutla, nos pusimos de pie, buscamos la salida y "nos bajamos" del bus, casi enfrente del lugar donde cocinaban las "pupas" que se convertirían en el desayuno de aquel sábado. Recuerdo 2 situaciones particulares suscitados en ese momento: El valor de las pupusas y el ingrediente con el que elaboraron algunas (ayote), no dejó de impresionar a más de alguno de los que vivíamos la aventura del viaje a Izalco.

Después de abordar un "camióncito" que nos condujo hacia el centro del pueblo de Izalco, nos dirigimos hacia el parque, lugar donde alguien tomó la fotografía que aparece en esta entrada, vaya momento, la verdad, de los primeros con este grupo de Periodismo, ojalá no sea el último, ojalá que no.

Caminata, bebida, almuerzo y salida, el viaje a Izalco llegaba a su fin, sin antes realizar la entrevista, tomar nota y sacar la fotografía que después serviría para darle el "toque" particular al reporte de la visita a dicho municipio. De regreso, decidimos cambiar el asiento "recinable" por el de "para 3 personas", jaja, otro ambiente, misma gente, un cierre bueno para un día que quedará marcado en el recuerdo académica de esta que es "La Segunda".

De regreso a San Salvador, la decisión de bajarnos hasta la Terminal, desde ahí, a abordar el bus que nos llevaría a la cercanía de Catedral, desde donde caminé a la Phila y luego a la parada de la 101-D, aquel día tenía que bajar nuevamente al Arzobispado y no tenía mucho tiempo, jeje, gracias a Dios todo bien al final.

Del parque infantil a la casa, desde ahí al Arzo, para luego regresar a la vivienda de mis padres, concluía la jornada del sábado y la cama me esperaba para el descanso merecido; insisto, un día para el baúl de los recuerdos, de las experiencias en grupo, de los momentos de felicidad, un saludo al lector, será hasta la próxima, bendiciones.