"La unión en el área notarial ..." RARC

Buen día, qué tal, un saludo al lector(a), esta entrada corresponde al miércoles 13 de Febrero, un día antes de esa fecha "especial", la vida continuaba, 4 días atrás "todo cambió", como dice por ahí una canción conocida, pero el mundo sigue girando, la paz debía llegar a mi corazón y soy sincero, al final de ese día iniciaba la recarga de tranquilidad y amor (que tanta falta hacía, la verdad!).

La mañana inició en la casa, me despierto, levanto, baño, desayuno y salgo, era miércoles, el "rojito" me esperaba en la cochera, tenía todo el ánimo de realizar la visita por la noche, al final ya no se pudo, venía el 14, debía esperar un día mas, ni modo!, ..., al final, así fue. Cabe mencionar que ese día me tocó madrugar al FSV por razones de negocios en los que me veo involucrado, ahí todo marcha lento, se vuelve tedioso y desgraciadamente la prepotencia de los agentes de seguridad quisieron batallar contra mi paciencia, ..., al final, salí victorioso; pero ahí no terminaba todo, porque en el CNR S.S. pasarían por mí para ir al de L.L., donde nos esperaba una plática con el Lic. JD, con quien se logró pasar con la ayuda de la señora de Asesoría del mismo Registro.

Llegando a TG, las actividades normales del día, con la diferencia que el ambiente esa semana cambió bastante, si lo comparamos con el de 5 meses atrás, gracias a Dios aquellas palabras del Lic. A se hacían realidad y la comunicación y comprensión de diferencias crecía en el área, de ahí surge el título de esta entrada. Aprovecho para lanzar la pregunta de la entrada: ¿qué habrá pasado?, ¿qué facilitó la unión en el área?, la verdad, todavía me queda la duda, pero bien!, gracias a Dios las "cosas" caminan bien!.

Llegó el mediodía y luego la tarde, ese día creo que me tocó ir a la UES, por la cuestión del horario y la inscripción de materias, no recuerdo bien, la verdad, puedo estar equivocado, jeje. Pasó la tarde y de regre a la casa, el viaje al Bambú no salio, ni modo, debía esperar un día mas, dificil, por la fecha, pero se debía de afrontar, ya las "cosas" se iban superando, pero no dejaba de doler, (incluso aún duele y bastantito, pero bien).

Al llegar a la casa, cena y cama, taba cansado, no tenía ganas de pensarla mucho, porque me hacía daño, dormir fue la mejor alternativa. Un saludo al lector, será hasta la próxima, si Dios nos lo permite, hasta entonces.